lunes, 28 de mayo de 2012

Ayerbe se pone manos a la obra para salvar la ermita de Nuestra Señora de Casbas. Huesca

La comisión formada por representantes del Obispado de Huesca, el Ayuntamiento de Ayerbe y los cofrades diseñaron la tarde de ayer las primeras líneas de actuación a seguir para poner a salvo la ermita de Nuestra Señora de Casbas de las grietas que amenazan su estructura. Como se recordará, el monumento, fechado en el siglo XVIII y considerado ‘La capilla Sixtina del Alto Aragón’ por los frescos que decoran su interior, tuvo que ser cerrado al público recientemente por motivos de seguridad. “En primer lugar, se ha tomado la decisión de estudiar la evolución de las grietas, si están yendo en aumento y la velocidad con la que avanzan y dependiendo de los datos que se obtengan, podremos valorar el estado de gravedad en el que se encuentra el edificio”, explicó Mercedes Fatás, primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Ayerbe, entidad que actúa como portavoz de la citada comisión.

Un técnico municipal y un arquitecto serán así los encargados de elaborar dicho documento. Al mismo tiempo, también se ha solicitado un informe a la DGA, con el fin de contar con una segunda opinión. Asimismo, se encargará un estudio geotécnico del terreno sobre el que se encuentra situado el templo, con el fin de determinar las causas del desplazamiento del muro sur, cuyo avance está poniendo en peligro la estabilidad del conjunto del inmueble. “En otro orden de cosas, se va a iniciar también el proceso para declarar la ermita como Bien de Interés Local, algo que no se había hecho hasta el momento”, añadió Fatás.

En busca de fondos
Todavía no puede hablarse así del coste que puede alcanzar la rehabilitación de este edificio histórico. Sin embargo, como anunció la primera teniente de alcalde ayerbense, cada una de las tres entidades participantes en la comisión va a tratar de recaudar fondos “por sus propios medios y en la medida de sus posibilidades”. “A día de hoy no nos atrevemos a hablar de cantidades, todo depende de lo que dictaminen los estudios que van a realizarse. Sabemos que será, seguramente, mucho dinero. De todas formas, se trata de una ermita muy querida en Ayerbe y en el conjunto del municipio y todos los miembros de la comisión estamos dispuestos a sacarla adelante”, aseguró la teniente de alcalde del Ayuntamiento de Ayerbe.


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Desde el consistorio se va a optar así por estudiar las diferentes líneas de ayuda de las que dispone el Gobierno de Aragón, aunque tampoco descartan realizar un llamamiento a las instituciones privadas. “Todos estamos de acuerdo en arrimar el hombro e ir de la mano”, subrayó Mercedes Fatás. El cierre de la ermita al público ha provocado así que las misas de los sábados de mayo dedicadas a la Virgen tengan que realizarse en la iglesia parroquial de Ayerbe. Por otra parte, la fiestas del Voto y de la cofradía previstas para el 2 y 3 de junio respectivamente, pasarán a celebrarse en el exterior de la iglesia.
Heraldo

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