Burgos. El 10% de edificios anteriores a 1893 tienen pasada la Inspección Técnica.

Los propietarios del 10% de los edificios más antiguos de la ciudad, incluidos en el primer padrón de los que deben pasar la Inspección Técnica de Construcciones antes del 1 de abril, ya ha cumplido el requisito. De esta manera, de los 336 incluidos en ese listado ya han presentado la ITC alrededor de 33 inmuebles, según los últimos datos facilitados por la Concejalía de Licencias y Vivienda, presidida por Dolores Calleja.

Los edificios incluidos en este primer padrón -los construidos con anterioridad al año 1893- están contado con una moratoria de tres meses ya que, en un principio, debían haber concluido el trámite de la inspección antes de que acabase el año 2012. Sin embargo, la Concejalía estimó oportuna la petición del Colegio de Arquitectos y se ha concedido esta ampliación de plazo hasta el próximo 1 de abril. 

Para recordar la obligatoriedad de cumplir con este trámite urbanístico, la concejala de esta área municipal explicaba que se enviará una nueva carta a los propietarios para informarles del nuevo plazo. En los próximos días, se comenzarán a lanzar los avisos ya que, a punto de concluir el mes de enero, apenas un 10% han presentado la ITC en el registro municipal creado al efecto por la Concejalía de Licencias y Vivienda.

Calleja precisaba que las Inspecciones Técnicas de las Construcciones pueden ser positivas o bien desfavorables. Según recuerda la responsable de Vivienda, las ITC que resulten desfavorables también se pueden presentar en el registro. En estos casos, la documentación presentada al Ayuntamiento debe recoger las mejoras que aconsejan los técnicos de cara a la conservación del inmueble. Atendiendo al tipo de actuaciones que se recomienden, se dará un nuevo plazo a los propietarios para que esa ITC pase a ser favorable una vez realizadas las obras pertinentes.

Dolores Calleja recuerda que es una obligación de los propietarios de los edificios de más de 40 años vigilar la salud del inmueble. De esta manera, se han establecido una serie de plazos para que en los próximos años se vaya haciendo efectivo el cumplimiento de la normativa urbanística. Las construcciones anteriores a 1893 son las primeras que deben atender la necesidad de pasar la ITC, después antes de que termine el año 2013 se ha elaborado un segundo padrón en el que se incluyen otros 1.240 inmuebles, edificaciones construidas con anterioridad a 1937. 

La concejal recuerda que la medida es beneficiosa ya que ayuda a «prevenir, detectar y solucionar problemas que con el transcurso del tiempo requerirían soluciones más complejas y costosas». Y además, por otra parte, contribuye a revalorizar los inmuebles y a que no se deterioren zonas de la ciudad por la desidia de algunos de sus dueños.

El Correo de Burgos