El concejal socialista Vicent Sarriá
denunció ayer que la Conselleria de Cultura, a través de la tramitación del
catálogo de inmuebles rurales a proteger, ha pedido al Ayuntamiento la
reconstrucción de una alquería derribada a principios de este año al declararse
la ruina inminente.
Los técnicos de Cultura consideran que
la desaparición del cuerpo principal de la alquería, situada en el camino del
Pouet, tiene un elevado valor patrimonial, por lo que han pedido su
restitución, al mismo tiempo que se declara Bien de Relevancia Local. El
conjunto es una propiedad privada y el uso previsto es de vivienda y almacenes.
Sarriá recordó que hace cuatro años
«propusimos al Ayuntamiento protegerla adecuadamente y suspender licencias, lo
que hubiera evitado el derribo autorizado». El catálogo está ahora en plena
negociación con la Generalitat y la reconstrucción corrige «una decisión mal
tomada en su día».
La alquería del Tío Nel.lo el Xurro y
una ermita cercana es un conjunto del siglo XVI, uno de los vestigios que
quedan del rico pasado de huerta de Campanar. Está enclavada en el barrio
urbanizado hace pocos años, rodeado de una zona industrial y viviendas nuevas.
La iniciativa del PSPV, comentó
Sarrià, fue que a través de un plan de reforma interior «se permitiera
consolidar la zona y conseguir gratuitamente todo este espacio protegido para
usos públicos». La propuesta fue rechazada con los votos del grupo popular.
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Por el contrario, el equipo redactor
del catálogo de Bienes y Espacios Protegidos Rurales incluyó como Bien de
Relevancia Local la alquería y un conjunto de edificaciones de su entorno. En
la misma manzana se han producido otras situaciones de ruina inminente y
derribos autorizados.
El edil dijo que en julio del pasado
año «insistimos de nuevo en la comisión de Urbanismo para que se actuara de
inmediato». En enero del pasado año, se autorizó el derribo a los propietarios,
que afectó al cuerpo principal.
La asociación de vecinos de Campanar
ha denunciado varias veces la desaparición paulatina de varias alquerías,
principalmente las situadas en la zona de huerta que se adentra hacia Mislata y
Paterna. Las declaraciones de ruina inminente se han sucedido en enclaves
protegidos, mientras que la crisis económica ha retrasado proyectos de rehabilitación.
En este último caso se encuentra un conjunto rural en la avenida Pío Baroja,
donde se ha previsto la ampliación del Bioparc con un parque de atracciones,
una inversión paralizada.
Otros
casos. En la
calle En Gordo, en el centro histórico, desapareció un retablo cerámico del
siglo XIX protegido y que forma parte de un plan urbanístico paralizado por la
crisis.
Más
bienes amenazados. La
Ceramo y la antigua fábrica de Bombas Gens se consideran ejemplos de inmuebles
protegidos afectados por promociones inmobiliarias que se demoran.
Deshaciendo lo mal hecho... en fin, y así todo
ResponderEliminarPues si, es lamentable que se arrepientan una vez realizado el destrozo...en Valencia es práctica común destrozar, derribar o no evitar el deterioro de mucho de nuestro patrimonio...así nos va.
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